Patio color árido
Antes
Después
Descripción
El perímetro de la vivienda presentaba zonas de tierra y hormigón desgastado que generaban polvo y encharcamientos. Se buscó un acabado continuo, cálido y fácil de mantener que armonizara con la carpintería exterior.
Se retiró el material suelto, se extendió geotextil y se ejecutó una base de 15 cm de zahorra compactada, ajustando pendientes para alejar el agua de la fachada.
La losa se vertió con 10–12 cm (HA-25) y plastificante. Se dispusieron juntas de retracción cada 4–5 m y se sellaron tras el curado inicial para controlar dilataciones.
El molde elegido fue adoquín grande para aportar ritmo y facilitar la limpieza. Se aplicó pigmento integral en tono árido tostado con un matizado suave que realza las juntas.
Finalmente, se lavó la superficie para revelar la textura y se aplicó sellador acrílico satinado, mejorando resistencia a manchas y rayos UV.
El resultado es un pavimento antideslizante, uniforme y de bajo mantenimiento, perfecto para tránsito diario y zonas de terraza.